El arte griego presenta grandes diferencias respecto al egipcio ya que se desarrolló en unas circunstancias muy distintas, entre los siglos VIII y III a.C.
Debemos destacar de este período la cerámica. Tenía una función ritual y decorativa, además se empleaban en los enterramiento y para transportar mercancías que viajaban por todo Europa.
La cerámica que empleaban para las mercancías no tenía motivos tan elaboradas ni decoradas tan exquisitos.
Ánforas de Dipylon
Atenas tenía la egemonía de la fabricación de cerámica con un gran afán narrativo.
Las Ánforas de Dipylon son un claro ejemplo de las vasijas que los griegos situaban en las cabeceras de las tumbas, a modo de lápida, señalizando de esta manera el lugar y el sexo de la persona fallecida.
Museo Nacional de Atenas,Ánfora para enterramiento femenino año 745 a.C
Museo Nacional de Atenas,Ánfora para enterramiento femenino año 745 a.C
El arte griego se caracteriza por tener una belleza naturalista (idealizada), además convierte al hombre en el centro de atención.
Algo novedoso en esta época fue el hecho de que los griegos firmaran sus obras cerámicas, como modo de reconocimiento público, sin embargo es algo que luego de pierde. Además combinaban dibujos y escritos narrativos.
Vaso François
Museo arqueológico de Florencia año 570 a.C
Se trata de un vaso en miniatura de gran calidad, una obra maestra realizada por el alfarero Clítias, uno de los más importantes de la época. Está repleto de escenas, alguna de ellas es: " Las bodas de Tetis y Peleo."